miércoles, 18 de febrero de 2015

Los criterios SMART y las 5 P

Y a continuación os voy a contar algo que te lo venden en todos sitios como si fuera oro, cuando es algo obvio, pero es que lo obvio vende mucho. ¿Por qué? Pues porque la mayoría de la gente NO piensa y vive la vida sin control y sin hacer las cosas obvias. Es así, somos perezosos por naturaleza y no nos gustan que nos digan que hacemos mal las cosas, pero estamos dispuestos a pagar pasta a coachers, predicadores, psicólogos, que nos digan lo que tenemos que hacer. Porque somos así de inútiles. Cuando queremos hacer algo, es más fácil ponernos en manos de otra persona, en vez de decir, YO soy quien tiene que hacer las cosas y YO lo hago. Si os ponéis a leer libros sobre life coaching, desarrollo personal, etc, una de las cosas que van a hablar en casi todos es sobre los criterios SMART. Yo os voy a contar hoy aquí dos cosas: los criterios SMART y la regla de las 5 "P" . Con eso está todo el "pescao vendío". 


Por tanto, primero, una vez que hayas pensado en lo que quieres, tienes que hacer que esos objetivos sean SMART. SMART es un acrónimo en lengua inglesa que significa: Specific (específico) , Measurable (medible), Attainable (alcanzable) , Relevant (relevante), Time Bound (en un plazo determinado). Con un ejemplo fácil se entiende mejor. Si tu objetivo es "tener mucho dinero", eso no vale, tienes que definir específicamente cuánto dinero va a ser, pensar en cómo lo vas a conseguir y que sea algo realista, y en cuánto tiempo te propones alcanzar esa meta. Vamos, consiste en definir un plan de acción. Es muy frecuente que cuando definas un objetivo, te lleve a tener que definir otro para poder alcanzar ese primero. Por ejemplo, en el caso que he puesto, a la hora de plantear cómo vas a ganar ese dinero, es probable que te haga tener que definir otras cosas, como qué profesión quieres tener, o lo que sea. Así, hasta que todo este bien definido en tiempo y espacio. Y una vez que hagas esto, ya solo tienes que aplicar las 5 P:

- Tener Pasión en lo que hagas, desear y amar lo que haces vehementemente.
- Persistir en el empeño, no renunciar a la primera de cambio, no abandonar ante el primer fracaso.
- Planificar bien cada etapa, definir todos los pasos a seguir claramente con criterios SMART. Dividir cada tarea grande en tareas más pequeñitas, e ir haciendo las cosas pasito a pasito, ver cómo vas a medir lo que vas consiguiendo y pensar qué hacer en caso de fracaso y en caso de éxito. 
- Rodearte de Personas que te apoyen en la consecución de tus metas y huir de las personas tóxicas y derrotistas cargadas de negatividad. 
- Y por supuesto, mucha Positividad, y esto es lo MÁS importante de todo.


Parece fácil así escrito, pero os aseguro que requiere mucho esfuerzo y dedicación hacerlo bien, por eso la mayoria de la gente NO lo hace y lo obvio sigue vendiendo y la gente comprando esos libros de autoayuda, muchos best seller, que acaban en la estantería del olvido.

miércoles, 11 de febrero de 2015

Ya estás en el paraíso

Breve, intenso y certero.
Cuándo al Dalai Lama se le preguntó qué es lo que más le sorprendía de la humanidad, contestó esto:


“Man.

Because he sacrifices his health in order to make money.
Then he sacrifices money to recuperate his health.
And then he is so anxious about the future that he does not enjoy the present;
the result being that he does not live in the present or the future;
he lives as if he is never going to die, and then dies having never really lived.”

"El hombre.
Porque sacrifica su salud para hacer dinero.
Luego sacrifica su dinero para recuperar su salud.
Está tan ansioso respecto al futuro que no disfruta el presente;
y el resultado es que no vive ni en el presente ni en el futuro,
vive como si nunca fuera a morir, y muere sin realmente haber vivido nunca."

¿Cómo se te queda el cuerpo?

Se acabaron las preocupaciones.
El paraíso es aquí y ahora.

martes, 20 de enero de 2015

¿Tú sabes lo que quieres?

Una de las cosas que me ha resultado más complicada en mi vida es algo que parece una tontería cuando se dice: saber qué quiero. Y cuando me refiero a saber lo que quiero, no hablo de qué quiero comer hoy o de si me gustan los perros o los gatos. Me refiero a lo que quiero en mi vida, mis metas a largo plazo, el gran propósito de mi existencia y los logros que anhelo alcanzar. Siempre he tenido una idea vaga sobre mi futuro, como si el hecho de fijarme una meta clara en todo, pudiera acabar con el lado sorprendente e inesperado de la vida. Cuando me di cuenta de esto, empecé claramente a reflexionar sobre cuáles eran mis sueños, lo que realmente me satisface, dónde me encuentro agusto, qué cosas me proporcionan placer, cuál es el destino de mi viaje. No es fácil. En los últimos años de mi vida he sido consciente de que no tenía muchas cosas claras sobre mí misma, y de que todos los errores que he cometido - decisiones que me han conducido a infelicidad, insatisfacción, baja autoestima - han sido consecuencia de no saber lo que quiero, o de querer cosas, mientras no hacía nada para alcanzar lo deseado. En este tiempo he leído mucho sobre esto, la información es infinita en libros, páginas web, vídeos... Es muy sencilla de entender, pero la dificultad es aplicarla. Al principio es un poco deprimente cuando tu consciencia despierta y ves todo el tiempo que has perdido con algunas personas y haciendo cosas que te alejaban de tu idea de felicidad. Pero  no hay que lamentarse, porque siempre estamos a tiempo de recuperar las riendas de nuestra vida. Lo fundamental es averiguar de una vez qué es lo que realmente deseamos, sin agobiarnos con cómo conseguirlo. Hay que dejar de pensar en lo que quieran los demás para ti, y qué es lo que se espera de ti. Creo que hay que desterrar esa idea parásita sobre que tenemos que devolverle algo al mundo, cuando nunca hemos pedido estar aquí, y comenzar a pensar de una vez en nosotros mismos y nuestras ilusiones. Hay que dejar de hacer las cosas solo con un fin y vivir en el presente y que las cosas sean un fin en sí mismo. Es fundamental acabar con las ideas de culpa y el sentimiento de deuda, porque no le debemos nada a nadie, porque somos libres de elegir nuestro propio destino. 

Lo primero, lo más importante es pensar qué es lo que quieres, pero tiene que ser algo muy concreto, porque si no NO vale. Esto es lo más complejo de todo, concretar, definir tu idea. Porque no vas a un bar y pides "algo para beber y comer", porque entonces, por ejemplo, te pueden poner la cerveza caliente de otro y la comida del perro. No, lo que haces es pedir concretamente lo que quieres. Pues la vida funciona igual. Si no sabes claramente nada de lo que quieres, como me ha pasado a mí en muchas cosas y me sigue pasando en cosas que aún no he logrado definir, vas a verte metido en situaciones (incluso pensando que lo que estás haciendo es "lo correcto"), hasta que te das cuenta de que la estás cagando, así de claro. NO es tarea fácil, de hecho es la parte más difícil de todas las partes de la vida, aunque no lo parezca. 

Próximamente más...

Y recuerda, usa protector solar.